Las Naciones Unidas jamás aceptaron que los colonos británicos en Malvinas sean una “parte” en la disputa. La ONU siempre ha dejado en claro que sólo hay dos partes en la disputa de soberanía: Argentina y el Reino Unido. Por tal razón es que la ONU le solicitó a ambos países que tomen debidamente en cuenta los “intereses” de los habitantes de las islas en sus negociaciones bilaterales. Sin excepción, ninguna organización internacional o foro ha aceptado que los súbditos británicos en las islas sean en la controversia una parte en la controversia diferente de su país de ciudadanía.

Es recién ahora que el Reino Unido hace esfuerzos por presentar a sus ciudadanos en las islas como alguien diferente a los de la metrópoli y los denomina como la “tercera parte” en la controversia. Esto es nuevo, puesto que los isleños han participado históricamente en reuniones bilaterales con Argentina siempre como miembros de la delegación del Reino Unido.

Después de que el Reino Unido aceptó cumplir con la resolución 2065 (XX), en 1966, Argentina y el Reino Unido celebraron varias reuniones bilaterales sobre las islas durante casi dos décadas. Ambos países iniciaron una serie de conversaciones y discutieron diferentes opciones para resolver la controversia, incluyendo la transferencia de la soberanía, la administración conjunta o un arrendamiento posterior de las islas. Había incluso proyectos de documentos en los que Gran Bretaña reconoció la soberanía argentina sobre las Islas y, como el Memorando de Entendimiento de 1968, fue inicialado por ambas delegaciones.

Durante los años 70, mientras las delegaciones de ambos países negociaban sobre la soberanía y las comunicaciones desde y hacia las islas, los isleños fueron parte de la delegación británica en las reuniones bilaterales. Las reuniones eran siempre bilaterales, tal como estipula el mandato de la ONU, lo cual no impidió que naturalmente los isleños formen parte de la delegación de su país. Argentina nunca se opuso y favoreció su participación debido a que sus “intereses” siempre fueron parte de los aspectos a tener en cuenta en las conversaciones bilaterales. Tanto es así que la Declaración Conjunta del 1 de julio 1971 dejó esto en claro cuando expresa que las dos partes en las negociaciones eran llevadas a cabo por las “delegaciones de la República Argentina y del Gobierno del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, ÉSTA ULTIMA CON LA PARTICIPACIÓN DE ISLEÑOS” (1).

Las sucesivas reuniones argentino-británica celebradas en los años 90 y 2000 sobre varias de las cuestiones relacionadas con la disputa siempre incluyeron a isleños como parte de las delegaciones del Reino Unido a las reuniones bilaterales. Nunca el Reino Unido presentó estas reuniones como “trilaterales”.

Argentina siempre ha declarado que está comprometida a respetar los intereses y el modo de vida de los habitantes de las islas de conformidad con los preceptos de las sucesivas resoluciones aprobadas por las Naciones Unidas y otros foros internacionales.

Está claro que el Reino Unido recurre a este nuevo argumento solamente para contradecir su propio comportamiento y para confirmar su desprecio al derecho internacional.

 

(1) Documento A/8368.